DOMINGO
XIV DEL TIEMPO ORDINARIO
Smta. Jhonny Rondón
Jjrondon_19@hotmail.com
MONICIÓN
DE ENTRADA
Hermanos en
Cristo Jesús. Nos encontramos en la XIV Semana del Tiempo Ordinario, y la
Iglesia hoy nos invita a experimentar el gozo de sentirnos amados, confortados
y enviados por el Señor para ser testigos de paz y de amor. Encomendamos en
esta hermosa misión nuestro pueblo venezolano, necesitado de paz y de
reconciliación, que podamos sentirnos enviados a transformar e iluminar la
realidad que vive nuestro pueblo. Empecemos con esperanza esta fiesta con
Cristo.
MONICIÓN
A LA PRIMERA LECTURA (Isaías 66:10-14)
El Señor se goza en su Iglesia
haciendo maravillas, deleitando al pueblo que quiso escoger como heredad.
Nosotros también somos pueblo escogido por Dios para vivir sus maravillas, para
que él se gloríe en nuestras vidas, dejémonos amar por él.
MONICIÓN
A LA SEGUNDA LECTURA (Gálatas
6:14-18)
La muerte y
resurrección de Cristo, son para Pablo signo encarnado de una nueva en Cristo,
con esta convicción desde la fe, somos en Cristo nuevas creaturas. Escuchemos.
MONICIÓN
AL EVANGELIO (Lucas 10:1-12,
17-20)
El Señor elige otros discípulos
para preparar su camino a Jerusalén. Les invita, así como nosotros a
prepararse, a renunciar a los apegos del mundo, y a ser testigos de la paz. Que
podamos, así como los discípulos luego de misionar, celebrar el gozo de ser
testigos de Cristo.
ORACIÓN UNIVERSAL
-Por el Papa y todos los pastores
que cuidan del pueblo de Dios. Para que renueven y aviven el deseo de ser
testigos de la paz, e iluminen con su acción pastoral la vida de la Iglesia.
Oremos al Señor.
-Por todos los gobernantes, en
especial, por Turquía que ha sufrido los desdenes del terrorismo, por Reino
Unido, ante el deseo de cambiar de horizonte en su vida nacional, también, por
nuestro país, necesitado de fe profunda y de esperanza en el Señor. Que nos sintamos acompañados por el Señor en
este camino de construcción de la civilización del amor, y que comprendamos que
es un trabajo conjunto, de reconocimiento del otro para lograr la paz y el
progreso social, oremos al Señor.
-Por todas las necesidades de
nuestra Iglesia: los enfermos, los abandonados, los que viven en crisis
existenciales y espirituales, para que sepamos que en este camino no estamos
solos, contamos con la compañía de aquél que vino para hacernos felices, oremos
al Señor.
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