sábado, 29 de septiembre de 2018

Con fervor y religiosidad celebran los Arcángeles en Catedral metropolitana


Mérida festeja natalicio de Mons. Salas y primer aniversario episcopal de Mons. Luis Enrique Rojas

Foto Revista El Sembrador

         Seminarista Pedro García II Teología

El obispo auxiliar merideño aseveró que si toda la iglesia local trabaja en pro de la causa de beatificación de Mons. Salas por la gracia de Dios “ese milagro el Señor nos lo va a conceder”.

En el marco de los 103 aniversarios del nacimiento de Mons. Miguel Antonio Salas Salas, la Revista El Sembrador del Seminario San Buenaventura de Mérida hizo un contacto directo con Mons. Luis Enrique Rojas Ruiz, quien expresó su gratitud hacia este obispo de probada virtud por su testimonio de caridad y servicio que son signos evidentes de santidad. Además agradeció al Señor por haber llegado felizmente a celebrar un año en el episcopado justamente en la festividad de los Arcángeles San Miguel, San Gabriel y San Rafael. 

Asimismo, puntualizó Mons. Rojas en su homilía que los arcángeles son mensajeros de Dios que cumplen una función específica dentro de la historia de la salvación. Citando a san Gregorio Magno explicó que San Miguel significa Quién como Dios, San Rafael, denota Medicina de Dios, y San Gabriel representa la Fortaleza de Dios.

         El obispo auxiliar de Mérida entre alegría y cercanía manifestó que “estoy feliz, contento y agradecido con el Señor de poder celebrar hoy la Eucaristía en acción de gracias a Dios y a la Santísima Virgen por mi primer aniversario episcopal. Por supuesto que cada día me siento más comprometido con la misión que el Señor me ha encomendado y confiado en que Él me dará la fuerza necesaria, la gracia para cumplir con este llamado”.

¿Cuál es su apreciación acerca del proceso de beatificación del Siervo de Dios Mons. Miguel Antonio Salas?

Cada día vemos con buen signo este proceso, y sabiendo que está de la mano del Cardenal Baltazar Porras Cardozo y del padre Javier Muñoz la Causa va por buen camino. En esta visita Ad Limina Apostolorum, hubo la oportunidad de darle mayor fuerza cuando se visitó la Congregación para la Causa de los Santos, esto nos indica que la Causa va por buen camino, y la muestra de hoy, el cariño de la gente en esta celebración, la participación de los fieles en las visitas que se han comenzado a realizar al corazón del Siervo de Dios en la capilla del Seminario Menor y todos estos tipos de detalles que hoy vimos en esta celebración nos indican que la Causa está bien orientada y muy pronto, si todos colaboramos y hacemos lo que nos corresponde, ese milagro el Señor nos lo va a conceder”.

Monseñor ¿qué significa para la Arquidiócesis de Mérida la presencia del corazón de Mons. Miguel Antonio Salas?

“Es una gracia, un regalo y una bendición que podamos tener nuevamente con nosotros el corazón del Siervo de Dios Miguel Antonio Salas Salas. No perdamos esta oportunidad, pues, seguramente este símbolo, esta expresión de fe, de amor por nuestro pastor, nos ayudará también a mantenernos siempre en contacto y en comunicación espiritual con él, presentándole todas nuestras necesidades, sabiendo que él ya goza de la presencia de Dios y tener ahora este símbolo en medio de nuestra Iglesia, pues, nos fortalece más y nos invita a mantener siempre vivo su pensamiento, su recuerdo y toda su obra en nuestra Iglesia Merideña”.

Finalmente, Mons. Luis Enrique exhorta a toda la feligresía merideña a que visiten devotamente el corazón del Siervo de Dios Mons. Salas en la capilla del Seminario Menor. También invita para el próximo 30 de octubre, cuando se cumplen 15 años de la muerte de este pastor según el corazón de Dios, por lo cual se espera una mayor afluencia de fieles en la Catedral de Mérida.


Clero Arquidiocesano. Foto Revista El Sembrador




viernes, 28 de septiembre de 2018

Celebran 103 Años del natalicio del siervo de Dios Mons. Miguel Antonio Salas cjm


Arquidiócesis de Mérida está de júbilo con su pastor

Celebran 103 Años del natalicio del siervo de Dios Mons. Miguel Antonio Salas cjm

San Juan Pablo II y el Siervo de Dios Mons. Miguel Antonio Salas cjm.
Foto cortesía Prensa Arquidiocesana

“Dar a conocer el culto privado del corazón de este santo obispo es una manera de reconocer su olor de santidad en la Iglesia y para nada perjudica su veneración, pues entre sus virtudes heroicas más resaltantes están el amor y su ternura de pastor hacia Dios y al prójimo”

Pbro. Jormin Fermín cjm

La iglesia local merideña festeja con corazón grande y ánimo decidido los 103 años del nacimiento del Siervo de Dios Mons. Miguel Antonio Salas Salas el 29 de septiembre de 1915. Fue incorporado a la Congregación de Jesús y María de los padres Eudistas y fungió como arzobispo metropolitano de Mérida. Este hombre de Dios, sencillo y humilde es una muestra fehaciente de que sí se puede llegar a la santidad siendo un pastor según el corazón de Dios.

Asimismo, el Pbro. Javier Muñoz, vicario episcopal para la Causa de los Santos de la Arquidiócesis de Mérida y vicepostulador, manifestó que “para mí, Mons. Miguel Antonio Salas inspira por su vida sencilla y humilde, hombre de oración, cien por ciento mariano. Pastor que sabía escuchar a sus sacerdotes; corregía cuando era necesario y acompañaba a tiempo y destiempo al pueblo de Dios y era caritativo. Él es un modelo de santidad para Mérida y nos alegraría que llegara a ser santo para gloria de Dios y salvación de los hombres”.

“Dar a conocer el culto privado del corazón de este santo obispo es una manera de reconocer su olor de santidad en la Iglesia y para nada perjudica su veneración, pues entre sus virtudes heroicas más resaltantes están el amor y su ternura de pastor hacia Dios y al prójimo”, expresó el P. Muñoz.

El padre vicepostulador aseveró que hay 220 testimonios fidedignos que son acertados para la causa de beatificación. Puntualizó que en la Arquidiócesis de Calabozo, donde también fue obispo antes llegar a  Mérida, lo recuerdan como “su pastor de ayer” por su cercanía y olor a oveja, como dice el papa Francisco. Resaltó el vicario para la causa de los santos, que no se puede dar mayores detalles, pero dijo conmovido que “los maestros de Calabozo acudían a Mons. Salas para que les ayudara a conseguir trabajo, y con una sola llamada de él, intercedía por ellos y resolvían sus problemas”.

Finalmente, se invita a toda la feligresía a acompañar a la Eucaristía en la Catedral de Mérida a las 9:00 de la mañana que será presidida por Mons. Luis Enrique Rojas, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Mérida, quien está cumpliendo su primer aniversario episcopal. Y al mismo tiempo, es importante hacer la oración de invocación para alcanzar los favores, gracias e intercesiones para sus necesidades. El corazón de Mons. Salas estará expuesto en la catedral por este fin de semana.

Oración de invocación

Señor Jesucristo, Pastor de Pastores,
que otorgaste a Monseñor Miguel Antonio Salas
un corazón de sacerdote y obispo con olor a oveja,
en el que florecieron virtudes de humildad,
entrega, fortaleza, amor al prójimo y a los más necesitados,
te pido me concedas por su intercesión el favor especial
que ahora imploro (…), así como la gracia de verlo glorificado para celebrar su vida y fama de santidad en toda la Iglesia. Te lo perdimos a ti que vives y reinas con el Padre y el Espíritu Santo, y lo encomendamos a la protección de María Santísima. Amén.

Padre Nuestro, Ave María, Gloria.